DEFINE UN LUGAR ESPECÍFICO
Lo primero es que definas un lugar específico para tu zona de estudio o trabajo. Como ya vimos, puede ser en una habitación / oficina, o un pequeño escritorio dentro de tu pieza o living. Lo importante es que dicho lugar no varíe, y que todos quienes vivan en casa sepan que ese espacio está destinado al trabajo o estudio.
Hacer esta definición, además, será el primer paso para agregar los elementos que te ayudarán a organizarlo.
PLANIFICADOR /CALENDARIO
Nada mejor que un planner o gran calendario que permita organizar las tareas diarias y semanales. Lo mejor será tener este elemento a la vista de todos, idealmente sobre el escritorio o colgado en la pared. Ahí podrás anotar, desde tus reuniones, hasta las pruebas de los niños. Para mayor organización, cada integrante de la familia puede rellenarlo con un color diferente y así tener muy claro cuál es la actividad que corresponde a cada uno.
DIARIO MURAL PARA TUS IDEAS
Tu zona de estudio o home office debe ser un espacio creativo. Por eso, siempre es bueno contar con un diario mural, que puede ser de corcho o de rejilla, donde puedas ir dejando recortes, ideas, anotaciones, fotografías, etc, de aquellas cosas que te hacen feliz y te inspiran. También puedes dejar espacio para mensajes o recordatorios. Lo mejor será ponerlo en el muro, donde puedas verlo mientras trabajas.
ORGANIZADORES DE ESCRITORIO
De plástico, acrílico, metal o madera, los organizadores de escritorio son perfectos para mantener todas esas cosas “sueltas” y que necesitas a la mano, en un solo lugar. Por ejemplo, tus lápices, clips, cargador de celular, etc. Sólo deberás buscar el que se ajuste al tamaño de tu mesa, asegúrate que tenga varios compartimentos o repisas para que puedas mantener todas las cosas en un lugar propio.
REPISAS
Las repisas son perfectas para almacenar aquello que necesitas a la mano, pero que no usarás constantemente. Además, son un excelente complemento para que puedas poner algunas decoraciones y poner linda tu zona de estudio. Si el espacio con que cuentas es reducido, entonces las repisas flotantes son excelentes ya que son livianas visualmente. Si cuentas con más metros cuadrados, o necesitas más superficie para dejar tus cosas, las repisas grandes, que van desde el suelo, son una excelente solución.
CAJONERAS
Amamos las cajoneras porque son prácticas y pequeñas. Se trata de un mueble de unos 60 cms. de alto, con ruedas, que incluye varios cajones para que puedas organizar lo que necesites. Muchas de ellas, incluso, vienen con un sistema de rieles para que puedas colgar carpetas o papeles. Su tamaño es ideal para que puedas ponerlas bajo el escritorio o junto a él, o incluso dentro de un clóset si tienes uno cerca.
ORGANIZADOR DE PARED
Los organizadores de pared son perfectos si cuentas con poco espacio de organización en tu escritorio. Se trata de una base de madera, metal o plástico a la que puedes colgar pequeños bolsillos, porta lápices o cajitas para almacenar lo que necesites. Lo bueno es que puedes agregar cuantos necesites y ajustarlos como mejor funcione para ti. Aprovéchalo para ordenar lápices, artículos de escritorio o de manualidades.
ARCHIVADORES
Un clásico de la organización, los archivadores son ideales para aquellos que trabajan con muchos documentos o deben realizar mucho papeleo. Por un lado, están los clásicos tipo carpetas que te permiten ordenar las hojas con un sistema de perforado, pero también están aquellos de estilo caja rígida (como de cereal). En ellos puedes introducir carpetas o papeles sueltos. Son mucho más decorativos y puedes ponerlos fácilmente sobre la mesa de trabajo o una repisa.
FRASCOS DE VIDRIO
Finalmente, una solución muy simple pero muy útil. Los frascos de vidrio siempre serán una buena alternativa para guardar artículos de escritorio como lápices, clips, tijeras, etc. Puedes usar varios iguales y decorarlos tú mismo, o comprar etiquetas autoadhesivas para marcarlos con su contenido. Una solución práctica, económica y muy decorativa para tu zona de estudio.