1. Escritorios plegables
Si en tu casa no cuentas con un espacio oficial para instalar una oficina o escritorio, ¡no te preocupes! Las mesas plegables son perfectas para poner en un rincón, junto a tu cama, o incluso en un clóset. Son sumamente pequeñas y muy funcionales.
Eso sí, deberás considerar poco espacio extra para almacenaje; una buena opción son un par de repisas flotantes.
2. Mini escritorio con ruedas
Si en tu hogar no cabe ningún otro mueble, pero necesitas un lugar para trabajar, dale una oportunidad a los mini escritorios con ruedas. Esta práctica mesa convertirá cualquier espacio en un home office, ya que puedes moverla a tu cama o sofá y regular su altura para que se ajuste a tus necesidades.
Cuando no lo estés usando como escritorio, las ruedas te hacen la vida más fácil para guardarlas en un armario, convertirla en un comedor o utilizarla como tu velador. ¡Es así de versátil!
3. No más de un metro
Si el espacio con que cuentas no sobrepasa el metro de ancho, existen mini escritorios, como mesas de 70 u 80 cm que puedes ubicar en un rincón, en un pasillo o, incluso, en tu terraza. La mayoría incluye un pequeño cajón para que puedas guardar tus archivos, tareas o artículos de oficina.
Sin duda, una opción minimalista y súper elegante.
4. Escritorio con repisas
Otra buena alternativa de escritorios para espacios pequeños, son aquellos que incluyen repisas como parte del mismo mueble. Es decir, no tendrás que preocuparte por comprar los elementos por separado.
Estos escritorios son muy útiles, sobre todo si necesitas lugar extra para guardar artículos de oficina o instalar una impresora o parlantes, por ejemplo.
5. Home office simple y estilizado
Si lo que buscas es un escritorio un poco más grande, pero tienes espacio limitado, una buena idea es escoger una mesa de líneas y diseño sencillo. Nos referimos a un mueble minimalista, sin cajones y de patas alargadas.
Esta última característica hará que se vea muy liviano visualmente y no saturará el espacio, además le dará un toque vintage a la decoración.
6. Estilo caballete
Las patas estilo caballete son otra opción interesante. Una propuesta que tuvo su auge hace algunos años pero que, al parecer, se mantendrá vigente por mucho tiempo.
Este tipo de escritorio es ideal para espacios medianos a grandes: si bien su diseño es simple, las patas abiertas abarcan varios centímetros extra hacia los costados. Sobre el estilo decorativo, son perfectos para espacios de estilo Nórdico o Boho Chic.
7. Con cajoneras
Si cuentas con una habitación que puedes transformar en escritorio, los mesones que vienen con cajoneras son ideales, sobre todo si necesitas mucho espacio para guardar papeles y carpetas.
Son perfectos si realizas trabajo remoto y necesitas tu home office, ya que te proporcionarán lugar de almacenaje, sin perder comodidad y estilo.
Y ojo, que puedes juntar dos y crear un mesón largo para dos o más puestos de trabajo.
8. Escritorio en L
Dejamos atrás los escritorios para espacios pequeños y damos paso a alternativas más grandes, ideales para una habitación u oficina. Los muebles en L son muy funcionales, ya que puedes instalarlos en un rincón y tener espacio para almacenar o un mesón extra.
Existen muchas alternativas: solo la mesa, con cajones, con repisas, o que combinan varios de estos elementos.
9. Un escritorio con presencia
Si cuentas con muchos metros cuadrados para armar tu oficina en casa, entonces juégatela por una gran mesa, que puedes instalar junto a la pared o, por qué no, al centro del espacio. Esta última alternativa le dará un toque muy clásico y transformará tu escritorio en el protagonista de la habitación.
Por eso, escoge una mesa con presencia, es tu oportunidad para jugar con materiales más pesados o colores más oscuros como el negro.
10. De altura regulable
Si pasas mucho tiempo sentado/a, debes recordar estirar y mover el cuerpo cada cierto tiempo. Para eso fin, los escritorios de altura regulable te permitirán cambiar de postura, cuidar tu salud y seguir trabajando al mismo tiempo.
Sea manual o eléctrico, las patas de esta mesa se pueden alargar para que puedas trabajar o estudiar tanto de pie como sentado. Algunos, incluso, han combinado este tipo de escritorio con una mini trotadora para hacer ejercicios mientras trabajan. ¿Te atreves?